Este bizcocho de limón y nata es de esos que se preparan en un momento y se disfrutan durante todo el día. Perfecto para una merienda de domingo o como postre casero, tiene una miga tierna, jugosa y aromática, con un glaseado suave que le da el toque final.
Lo mejor es que no tiene complicación: mezclamos, horneamos y listo. Ideal para quienes buscan una receta rápida, sin renunciar al sabor y a una textura perfecta.

Ingredientes

Para el bizcocho:

• 100 g de azúcar

• Ralladura de 1 limón

• 100 g de aceite de oliva suave (o de girasol)

• 2 huevos (a temperatura ambiente)

• 80 ml de zumo de limón

• 100 g de nata líquida para montar (35 % M.G.)

• 220 g de harina repostera

• ½ cucharadita de sal

• 2 cucharaditas de levadura química (polvo de hornear)

• 1 cucharadita de bicarbonato

Para el glaseado:

• 60 g de azúcar glasé

• 30 ml de nata líquida

• Pistacho triturado con ralladura de limón

Cómo hacer bizcocho de limón y nata con glaseado

1. Preparamos los ingredientes y el horno
Pesamos y medimos todos los ingredientes antes de comenzar. Encendemos el horno a 180 °C con calor arriba y abajo, y preparamos el molde engrasándolo bien. En este caso usamos un molde tipo Nordic Ware, pero cualquier molde de unos 20-22 cm funcionará.

2. Aromatizamos el azúcar
En un bol, mezclamos el azúcar con la ralladura de limón, frotándolos con los dedos para que el azúcar se impregne bien del aroma cítrico.

3. Integramos los ingredientes húmedos
Añadimos el aceite y batimos durante un par de minutos. Incorporamos los huevos uno a uno, batiendo tras cada adición. A continuación, vertemos el zumo de limón y finalmente la nata. Mezclamos hasta obtener una masa cremosa y bien integrada.

4. Añadimos los ingredientes secos
Tamizamos la harina, la sal, la levadura y el bicarbonato directamente sobre la mezcla anterior. Removemos suavemente hasta que tengamos una masa uniforme, sin grumos.

5. Horneamos el bizcocho
Vertemos la masa en el molde y alisamos la superficie. Llevamos al horno y cocemos durante unos 60 minutos a 175 °C. Pasado este tiempo, comprobamos con un palillo que el interior esté bien cocido. Si sale limpio, lo sacamos del horno.

6. Enfriamos y desmoldamos
Dejamos reposar el bizcocho en el molde unos minutos y luego lo desmoldamos con cuidado sobre una rejilla para que enfríe por completo.

7. Preparamos el glaseado
Mientras tanto, mezclamos la nata con el azúcar glase , removiendo hasta que se integre bien y se forme un glaseado ligero. Lo vertemos sobre el bizcocho aún templado para que lo absorba ligeramente y quede brillante.

8. Decoramos al gusto
Podemos decorarlo con rodajas de limón, ralladura de limón, con azúcar perlado o como en mi caso con pistacho truturado mezclado con ralladura de limón ¡Queda precioso y muy apetecible!

Consejos y alternativas

• Puedes sustituir el zumo de limón por zumo de naranja si prefieres un sabor más suave.

• Si usas nata agria o yogur griego en lugar de nata líquida, obtendrás una miga aún más jugosa.

• Este bizcocho aguanta muy bien de un día para otro, incluso mejora en sabor.

Un bizcocho que siempre apetece, con ingredientes sencillos y un resultado que sorprende. Si lo pruebas, seguro que se queda entre tus favoritos.

Resumen de preparación: Bizcocho de limón y nata con glaseado

1. Precalentar el horno a 180 °C y engrasar el molde

2. Aromatizar el azúcar mezclándolo con la ralladura de limón

3. Añadir el aceite y batir un par de minutos

4. Incorporar los huevos uno a uno, luego el zumo de limón y la nata

5. Tamizar los ingredientes secos (harina, sal, levadura y bicarbonato) sobre la mezcla anterior e integrar

6. Verter en el molde y hornear a 175 °C durante 60 minutos

7. Comprobar la cocción, dejar reposar y desmoldar sobre una rejilla

8. Preparar el glaseado mezclando la nata con el azúcar glassé

9. Verter el glaseado sobre el bizcocho templado

10. Decorar al gusto y dejar enfriar antes de servir