El cabello de ángel es uno de esos rellenos clásicos de la repostería gallega y española: tarta de Mondoñedo, roscones, empanadas dulces… La forma más común de prepararlo es cociendo la calabaza cidra en agua, pero hoy te propongo un cambio que marca la diferencia: asar la calabaza en el horno.
Al asarla, conseguimos una pulpa más seca, con un sabor más concentrado y sin necesidad de escurrir tanta agua. El resultado es un cabello de ángel con una textura más firme y un color más dorado, perfecto para rellenar tus dulces caseros.
Ingredientes ( para 1 kg de pulpa limpia)
- 1 calabaza cidra (cantidad al gusto)
- Azúcar (aprox. 300 g por cada kilo de pulpa cocida)
- 200 ml de agua
- 1 rama de canela
- Piel y zumo de 1 limón
Paso a paso
Asar la calabaza
Precalentamos el horno a 200 °C. Partimos la calabaza cidra en trozos grandes, con la piel, y los colocamos en una bandeja de horno. La asamos durante 1 hora aproximadamente, hasta que la pulpa esté tierna y se desprenda con facilidad de la piel.
Preparación del almíbar
Mientras la calabaza se asa, ponemos en un cazo 200 ml de agua, y los 300 g de azúcar. Cocemos a fuego medio hasta que el azúcar se disuelva bien y tengamos un almíbar ligero (unos 10 minutos).
Limpiar la pulpa
Una vez la calabaza está asada, con ayuda de un tenedor retiramos las semillas. Luego, con una cuchara, extraemos la pulpa fibrosa de la piel. Una vez limpia, la desmenuzamos con las manos para separar bien los filamentos y la pesamos.
Cocinar con azúcar y aromas
Ponemos la pulpa en una olla junto con el almibar, la rama de canela y la piel y el zumo de limón. Llevamos al fuego y cocinamos lentamente durante 1 hora y media. Durante este tiempo, el cabello de ángel irá tomando un tono dorado y una textura más espesa y caramelizada. Si vemos que se seca demasiado antes de tiempo, podemos añadir un poco de agua.
6. Envasado
Cuando alcance el punto deseado —hebras bien separadas, jugosas y brillantes—, lo retiramos del fuego. Repartimos el cabello de ángel en botes esterilizados, los cerramos bien y los dejamos enfriar boca abajo. Se conservarán en la nevera entre 3 semanas y 1 mes, o más tiempo si preferimos congelarlo.
Resumen fácil de preparación
- Partir la calabaza en trozos regulares y cocerla con piel 1 hora.
- Escurrir, templar y retirar semillas y piel.
- Desmenuzar la pulpa en filamentos y pesarla.
- Añadir 400 g de azúcar por kilo de pulpa, canela y piel de limón.
- Cocer suavemente 1 h 30 min hasta que caramelice.
- Guardar en botes esterilizados y conservar en frío.