Los panecillos de bocadillo con yogur son un recurso que hay siempre en mi congelador. De distintas formas o recetas, pero son tan cómodos y ricos que no pueden faltar. Para las meriendas o para llevar al cole o para las hamburguesas incluso son ideales.
Estos son muy suaves y esponjosos, y con esta forma que los hace tan bonitos y vistosos fueron un éxito. Los hice para la merienda del cumple del primogénito, y les encantó, y que decir de los bonitos quedan en la mesa .
Os cuento como los hice, así que toma nota de esta receta tan sencilla y que te va a encantar.
Ingredientes para hacer panecillos de bocadillo con yogur
Para el fermento:
- 25 g de masa madre de centeno
- 150 de harina de espelta
- 150 g de filmjolk (u otro yogur líquido)
Para la masa final
- 450 g de harina de fuerza
- 450 g de harina de uso común
- 100 g de harina integral
- 300 g de fermento
- una cucharada de miel
- 25 g de mantequilla.
- 775 g de filmjolk (o leche o yogur)
- 14 g de sal
- 1 g de levadura seca de panadería
Elaboración paso a paso
- Hacemos el fermento la noche antes mezclando todos los ingredientes.
- A la mañana siguiente echamos todos los ingredientes en la cubeta de la amasadora menos la mantequilla, amasamos durante unos 5 minutos y luego vamos incorporando la mantequilla.
- Seguimos amasando a velocidad suave hasta obtener una masa suave y elástica.
- Dejamos reposar un par de horas tapado en un bol engrasado.
- Cuando ha doblado volumen, dividimos la masa en porciones de unos 60 g y hacemos bolas que dejaremos reposar unos 10 minutos.
- Con un sello de pan broetchen hacemos las marcas en los panecillos (con fuerza pero sin llegar a cortarlos del todo).
- Una vez marcados, los vamos colocando en las bandejas de hornear y los espolvoreamos con agua.
- Les ponemos semillas de sésamo por encima, que con el agua se quedarán pegadas.
- Los dejamos levar tapados unas horas (el tiempo es orientativo, pues depende de la temperatura de vuestra cocina).
- Los horneamos a 200º unos 15 minutos.
- Cuando están cocidos los quitamos y los colocamos en una rejilla para que enfríen.
Y listos para una merienda de lujo ¡¡¡¡
¿Que os parece tomarlos con una crema de avellanas y chocolate casera?
Con estas cantidades os salen bastantes, así que salvo que los hagáis para alguna ocasión especial, os recomiendo que los congeléis. Se conservan maravillosamente. Sacarlos 15 o 20 minutos antes, podéis darle un calentón en la tostadora y estarán como recién hechos.