La remolacha tiene gran variedad de usos en la cocina, tanto en dulces cómo en salados, ensaladas o panes de todo tipo. Quizá por su peculiar sabor terroso y dulce que encaja perfectamente en casi cualquier plato.
La combinación con el queso es ideal y este helado de remolacha con queso fresco es un maridaje perfecto que os va a encantar y sorprender, no sólo por su sabor, si no por esa textura cremosa y suave que le da el queso.
Os cuento la receta.
Ingredientes
- 275 g de leche entera
- 50 g de nata 35% MG( nata de montar)
- 25 g de leche en polvo
- 6 g de lecitina de soja
- 75 g de azúcar invertido
- 100 g de queso crema gallego o queso feta
- 100 g de puré de remolacha
El paso a paso.
Primero preparamos el puré de remolacha y para ello, mejor utilizamos remolachas asadas al horno en papillote. Pero en caso de no tener, nos servirán las que podemos comprar ya cocinadas.
Trituramos la remolacha con el queso, hacemos un puré y reservamos.
Aparte, en un cazo o procesador, mezclamos la leche, la nata y la leche en polvo y lo calentamos. Añadimos el azúcar invertido y la lecitina de soja y dejamos que se vaya calentando, sin dejar de remover y sin que llegue a hervir. Lo retiramos y cuando está frío, añadimos el puré de remolacha. Lo integramos hasta tener una crema homogénea y lo guardamos en el frigorífico un mínimo de 6 horas.
Pasado el tiempo de reposo de la crema, estará lista para mantecar. La echamos en la heladora y programamos. En mi caso ha estado 35 minutos. Cuando el helado está listo, lo echamos en un recipiente y lo dejamos en el congelador unas horas para que adquiera un poco de consistencia y estará listo para degustar.
El helado de remolacha, además de estar muy rico es muy vistoso, y es ideal para combinar con otros helados. La remolacha marida estupendamente con el chocolate negro y los frutos secos, pero intentar incluirlos en la formulación, nos daría un helado con una textura demasiado dura o muy dulce, por las cantidad de azúcar que tendríamos que usar para evitarlo.
Así que yo lo he combinado con helado de pistacho.
Lo podemos decorar con coco , frutos secos o chocolate negro, o simplemente sin nada.