Esta es la receta de una de las empanadas gallegas más clásicas y tradicionales, hechas con masa de pan. Si quieres hacer una empanada gallega tradicional, auténtica y sencilla, sigue leyendo y ponte a ello, pues sorprenderás a todos en tu próxima comida.
Ingredientes de la empanada de bacalao
Para la masa:
(no la he empleado toda en la empanada, con la que ha sobrado hice un pan)
- 450 g de harina gallega (o harina panadera)
- 50 de harina de maíz o centeno.
- 300-350 ml agua
- 3 cucharadas de aceite del relleno
- 5 g de levadura fresca o 1,5 g de seca (125 g de masa madre)
- 225 g de masa vieja (opcional)
- 10 g de sal
Para el relleno o zarangallada:
- 300 g de cebolla (cebolla chata)
- ¼ de pimiento morrón (o pimientos del piquillo)
- 250 ml de aceite de oliva
- 1 hoja de laurel
- 1 cucharadita de pimentón dulce
- 300 g de bacalao desmigado crudo
- 1 pica de sal
Como hacer la empanada de bacalao
Comenzamos preparando la zarangallaga o relleno de nuestra empanada. Picamos 300 g de cebolla, fina y la ponemos en una olla o sartén con 250 ml de aceite de oliva suave, le añadimos el pimiento morrón también picado y la hoja de laurel. En caso de no usar pimientos del piquillo de bote, se los pondremos luego al final, o podemos omitir el pimiento.
Lo acercamos al fuego y lo dejamos pochar a fuego muy suave, al menos durante una hora o una hora y media y cuando esté lista la apartamos. A continuación, preparamos el bacalao, lo cortamos, desmenuzamos, y se lo añadimos a la cebolla, ya pochada y fuera del fuego. Lo mezclamos todo y lo dejamos reposar y enfriar un poco antes de montar la empanada.
Mientras la cebolla se va pochando, hacemos la masa; En un bol echamos 450 g de harina gallega(si no conseguís esta harina, usamos panadera con la siguiente proporción: 400 g de panadera y 50 g de harina integral), y 50 g de harina de maíz o centeno. En el centro echamos el resto de los ingredientes; 300 g de agua, un chorro de aceite del relleno, 5 g de levadura fresca desmenuzada (o 150 g de masa madre si la usamos). La cantidad de agua puede variar con las diferentes harinas, pues no todas absorben la misma cantidad. Por ello vais añadiendo el agua poco a poco y observando siempre la masa. Mezclamos todo y dejamos reposar la masa y unos minutos. A continuación le añadimos la sal con un poco de agua, y la comenzamos a amasar de nuevo. Si vemos que nos queda muy espesa y densa, añadimos un poco más de agua. Amasamos hasta que la masa esté elástica y la ponemos en un bol. La dejamos reposar tapada hasta que doble el volumen.
Una vez la masa ha doblado el volumen, ya podemos montar la empanada. O bien podemos guardarla en la nevera al igual que el relleno y montar y hornear la empanada al día siguiente.
Encendemos el horno a 220 °C con calor arriba y abajo y forramos un molde con papel de horno. Le echamos una cucharada de aceite del relleno y lo pincelamos por toda la superficie. Esto hará que la masa nos quede más sabrosa y tostadita por la base. Dividimos la masa en dos partes, dejando la de abajo un poco más grande y la estiramos con la forma del molde que usemos, dejando un poco más grandes los bordes. Para esta empanada he usado 1 kg de masa, y a la parte de abajo le puse 550 g y a la de arriba 450 g. No obstante, esto es relativo, pues depende del grosor que quieras darle a tu empanada.
Ponemos la masa en el molde, el relleno encima, y estiramos la otra masa para taparla. Esta masa la estiramos del tamaño del molde, sin que sobresalga. Una vez estirada, la colocamos tapando la empanada y la sellamos en los bordes. Vamos doblando la masa que nos quede bien sellado, le hacemos un agujero en el centro a modo de chimenea. Finalmente, la decoramos con los restos de masa si nos sobra alguna y la pincelamos con el aceite de la zarangallada.
La horneamos a 220 durante unos 40 minutos, hasta que esté bien doradita. La retiramos del horno y la dejamos atemperar antes de catarla y disfrutar de esta maravillosa empanada tradicional gallega.