Las filloas son uno de los grandes tesoros de la gastronomía gallega, un clásico en las cocinas durante el carnaval y otras festividades. Finas, suaves y con un toque dorado irresistible, estas deliciosas crepes gallegas tienen su propia identidad y se disfrutan solas o acompañadas de miel, azúcar, chicharrones o incluso caldo.
Para quienes siguen una dieta sin gluten, conseguir una buena textura puede ser un desafío, pero con esta receta lo lograrás sin problema. Hemos adaptado la receta tradicional usando una mezcla de harinas sin gluten y psyllium, consiguiendo unas filloas flexibles, finas y llenas de sabor. ¿Te animas a probarlas?
Ingredientes:
Para unas 12-14 filloas
- 2 huevos
- 300 ml de agua
- 10 ml de psyllium
- 15 ml de sal
- 100 g de mezcla de harinas sin gluten (50% fecula , 25% Teff integral y 25 %harina arroz blanco)
- 100 ml de leche o caldo de huesos
- Tocino para untar la sartén
Elaboración de las filloas sin gluten paso a paso
1. Preparamos el almohado de las filloas
En un bol grande, batimos los huevos y añadimos el agua y el psyllium. Mezclamos bien hasta integrar y dejamos reposar durante 30 minutos. Este tiempo de reposo es fundamental para hidratar bien las harinas y conseguir una masa sin grumos.
2. Añadimos las harinas y la leche
Pasado el tiempo de reposo, incorporamos la sal y la mezcla de harinas sin gluten poco a poco, batiendo constantemente hasta obtener una masa homogénea y sin grumos. Finalmente, ajustamos la textura y para ello añadimos leche, agua o caldo de huesos y volvemos a mezclar.
3. Calentamos la sartén y comenzamos a cocinar
Ponemos una sartén antiadherente a fuego medio y la untamos con un trozo de tocino para engrasarla. Es importante que la sartén no esté demasiado caliente para evitar que las filloas se quemen antes de extenderse correctamente.
4. Cocinamos las filloas
Vertemos un cucharón de masa en la sartén y la giramos rápidamente para que la mezcla se extienda de forma uniforme. Dejamos que se cocine hasta que los bordes empiecen a despegarse y la superficie ya no esté líquida.
Con la ayuda de una espátula o con las manos, damos la vuelta a la filloa y la dejamos cocinar unos segundos más por el otro lado. Cuando esté lista, la retiramos a un plato y repetimos el proceso con el resto de la masa.
5. Servimos y disfrutamos
Las filloas sin gluten están listas para disfrutarlas solas o con el acompañamiento que más te guste: miel, azúcar, chocolate, chicharrones o incluso rellenas de crema.
Consejos para unas filloas perfectas
- El reposo de la masa es fundamental para conseguir la textura adecuada, pero no necesitan tanto como las filloas con gluten.
- El grosor debe ser fino, pero sin que la masa quede demasiado líquida. Si ves que está demasiado espesa, puedes añadir un poco más de agua o leche.
- El calor de la sartén debe ser medio, ni muy alto ni muy bajo, para que las filloas se cocinen de manera uniforme. Importante no cocinarlas ex exceso. Para las filloas sin gluten debe de ser un poco menos de calor que para las normales.
- El tocino para engrasar es clave para el sabor tradicional, pero si prefieres una opción vegana, puedes usar un poco de aceite o mantequilla derretida.
Conclusión
Hacer filloas sin gluten en casa es más fácil de lo que parece y con esta receta conseguirás un resultado delicioso y auténtico. Ya sea para celebrar el carnaval, la Pascua o simplemente darte un capricho, estas filloas son una opción perfecta para disfrutar de la tradición gallega sin gluten.
Te dejo el enlace al vídeo para que veas que fáciles