La rosca de yema da Guarda» es un dulce gallego y tradicional típico del municipio de A guarda, del que lleva el nombre. Una deliciosa masa abriochada con forma de rosco y aunque pueda parecer un roscón de reyes o de pascua, no es exactamente la misma masa y en el interior tiene una crema de yema.
No soy de A Guarda y esta receta no es pasada de generación en generación, pero, y a pesar de que no será la misma, la he comido varias veces y esta es mi versión de este maravilloso dulce.El original no lleva Thang Zong ni azúcar invertido ( pero si la hacen con un fermento de agua), pero por mi experiencia con este tipo de masas, le aporta una textura mucho más esponjosa, así que, al igual que en muchas de mis masas de este tipo, también lo usaré.
Ingredientes
para el fermento:
- 50 g de harina
- 40 ml de leche o agua
- 3 g de levadura seca de panadería
para el thang Zong:
- 60 g de leche o agua
- 12 g de harina
para la masa final:
- Todo el fermento
- El Thang zong
- 500 g de harina
- 90 g de mantequilla
- 3 huevos
- 60 ml anís
- un pellizco de sal
- 100 g de azúcar
- Una cucharada de miel (o azúcar invertido)
Para la yema:
- 4 huevos
- 200 g de azúcar
Elaboración de la Rosca de Yema de A Guarda.
La noche antes preparamos el fermento y el Thang Zong con los ingredientes. Podéis ver como hacerlo aquí
A la mañana siguiente preparamos todos los ingredientes de la masa y los echamos en la cubeta de la amasadora. Programamos y amasamos durante unos 20 minutos. Si nos queda una masa muy pegajosa, vamos haciendo reposos en el amasado. cuando la masa está elástica y suave la tapamos y la dejamos levar unas tres o cuatro horas o incluso más, dependiendo de la temperatura de la cocina. A continuación hacemos la yema para poner dentro de nuestra rosca. Yo he usado la Cookexpert de Magimix, pero podéis hacerlo a mano si no tenéis robot. Para ello mezclamos los ingredientes y los acercamos al fuego sin dejar de remover esperamos a que se cueza y espese.
Para hacerlo en la MGX, usamos el accesorio de montar las claras. Ponemos los ingredientes en la cubeta de acero y programamos 15 minutos a 90ºC y a la velocidad mínima. Se irá cociendo y espesando poco a poco. Cuando está lista la pasamos a una manga pastelera para que se vaya enfriando y la reservamos hasta el momento de usar.
Cuando la masa ha doblado su volumen formamos la rosca. Con estas cantidades de masa podemos hacer dos roscas, pero la crema no será suficiente, por lo que tendréis que duplicar la cantidad de crema . En mi caso hice una rosca y bollitos, que fueron un éxito también.
Dividimos la masa a la mitad y con cada una de ellas haremos un roscón. Esta masa la dividimos en dos partes. Con una de estas partes hacemos una especie de cabos o culebrillas que luego estiramos con un rodillo en forma de rectángulo estrecho y alargado ( unos 70×25 cm). En el medio ponemos la yema de extremo a extremo ( dependiendo del ancho de nuestra boquilla o los gustos, haremos un surco o dos) y doblamos la masa por la mitad cuidando que quede bien cerrada, la enroscamos y hacemos lo mismo con la otra parte. Una vez tenemos los dos cabos listos le damos forma igual que al roscón, y dejamos que fermente de nuevo. Unas tres horas a 23ºc. Cuando la masa está lista, la decoramos con yema por los surcos del trenzado y la horneamos a 180 ºC durante 15 minutos. Pasado este tiempo la sacamos del horno y la pincelamos con huevo batido y la espolvoreamos con azúcar normal. Esta rosca no la pincelamos con el huevo antes de hornear, si no que lo hacemos después con huevo o almíbar. La metemos dentro del horno otros 5 minutos y ya la retiramos para una rejilla a enfriar.
Y mirad qué maravilla de miga y de corte. No puedo enseñaros el sabor y la suavidad de esta miga, que se conservará estupenda hasta tres días después, pero me encantaría. Así que si os ha gustado, os animo a que la hagáis.
y los bollitos con la misma masa una delicia que podéis ver aquí.
Hola Monika , para el último levado la puedo dejar en la nevera , verdad ? Y a la mañana siguiente seguir con la receta . Gracias